ERBOL : 17:22
De enero a la fecha se quemaron 145.842 hectáreas, la
mayoría de ellas en los últimos 30 días como consecuencia de la sequía y el
calor, siendo el más afectado municipio de Ixiamas, ubicado en la parte norte
del departamento de La Paz, con 91.755 hectáreas calcinadas, según un informe
dado a conocer este jueves por el Programa de Transparencia Forestal de Herencia.
El segundo municipio con mayor afectación, destaca el
documento, es Reyes, situado en el departamento del Beni, mismo que reporta
hasta estos días 42.627 hectáreas quemadas por el fuego.
El reporte de Herencia, hace también referencia al denominado
Bolsón de Rapirrán, que se encuentra en el municipio de Bella Flor,
departamento de Pando, donde se identificó 1.100 hectáreas quemadas y 600
hectáreas en la Reserva Nacional de Vida Silvestre Amazónica Manuripi.
El monitoreo identificó también un incendio forestal
significativo en el municipio de San Pedro, a orillas del Río Orthon, con más
de 1000 hectáreas.
Ganadería en emergencia
A comienzos de esta semana la ganadería boliviana se declaró
en estado de emergencia como consecuencia de la sequía y la proliferación de
incendios en el país.
El presidente de la Confederación de Ganaderos de Bolivia
(Congabol), Mario Hurtado, la situación es de emergencia en toda la parte
amazónica del país, con énfasis en Santa Cruz, Beni y Pando, donde se
desarrollan en la actualidad varios incendios.
“Tenemos cerca de 300 focos de calor, más que el año pasado,
cualquier cosa se quema, entonces estamos en emergencia”, manifestó Hurtado,
citado por Prensa Latina, quien informó que ante la actual situación se
activaron los planes de contingencia del sector para evitar pérdidas, sobre
todo a causa del fuego y las altas temperaturas.
Al mismo tiempo, descartó que los ganaderos quemen sus
pastos intencionalmente, como algunos pueden pensar, y sostuvo que ahora tienen
conciencia sobre la necesidad de no provocar incendios.
El presidente de Congabol recordó también que como
consecuencia de la sequía no se puede mover el ganado, porque el mismo se
encuentra desnutrido, además de que en esas regiones carecen de pozos y lagunas
donde llevarlos para que no se deshidraten.
En Santa Cruz la semana anterior se declararon en emergencia
siete municipios, los cuales reclamaron ayuda de la gobernación para conseguir
carros cisterna, con la intención de llevar el agua a animales y personas.
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